Aunque no es tan común hablar de adiestramiento de gatos como el de los perros, sí que puedes entrenar y adiestrar a estos animales.
Así que si quieres que tu felino tenga un buen comportamiento y sorprenda con los trucos que puedes enseñarle, sigue leyendo para saber lo que necesitas para lograrlo.
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¿Se puede adiestrar a un gato?
Como dije anteriormente, sí es posible adiestrar a tu gato, aunque puede ser un poco más complicado que al entrenar un perro, no porque los gatos sean menos inteligentes sino porque son más independientes que los caninos.
Por lo anterior, es importante que tengas una muy buena relación con tu felino para que sea más fácil adiestrarlo y enseñarle nuevos trucos.
Es ideal que desde pequeño el gato haya socializado correctamente, esto quiere decir que el felino haya tenido contacto con diferentes animales, personas, objetos y sonidos, para que reaccione mucho mejor a diferentes situaciones, que no sea tan asustadizo o arisco y esté más dispuesto a seguir órdenes.
¿Qué necesitas para entrenar a tu gato?
Primero que todo, paciencia. No te desesperes si tu gato no aprende rápido o no te pone la atención que esperas, todo requiere de tiempo. Si te estresas y regañas a tu gato probablemente menos atención o motivación tenga de aprender.
Por otro lado, son necesarios los refuerzos positivos, esta es la mejor manera de enseñarle algo nuevo a tu mascota, ya que asociará la acción con el premio. Puedes usar algún snack o galleta que le guste mucho a tu felino.
Y, por último, necesitas dedicarle tiempo. Las sesiones de entrenamiento deben ser cortas, pero con constancia, es decir, si le estás enseñando algún truco nuevo, dedica cierto momento del día por varios días hasta que tu gato lo aprenda. Puedes añadir las sesiones de entrenamiento a su rutina diaria para que tu gato se acostumbre.
Trucos muy fáciles para enseñarle a tu gato
Acudir cuando llamas
- Escoge el premio, puede ser un snack especial para gatos o un juguete que le encante a tu felino y lo motive a acercarse a ti.
- Hazte al otro lado de la habitación, es decir, alejado de donde se encuentra tu mascota, pero dejando que te pueda observar. Muéstrale el premio y utiliza algún comando para que lo asocie con la acción de ir hacia ti y tener una recompensa, puede ser “ven aquí” o solo “ven”.
- Realiza esto por varios días, en sesiones cortas de unos 5 minutos. Hazlo en diferentes zonas de la casa y cada vez más alejado de tu mascota. Cuando empiece a entender, realiza lo mismo, pero en un lugar donde tu gato no te vea, es decir, que tú estés en una habitación diferente cuando lo llames.
- Recompénsalo inmediatamente cuando se acerque a ti luego de que lo llamaras. Progresivamente irás quitando la recompensa para que se acerque a ti sin necesidad de darle un premio.
Sentarse
- Igual que el anterior, lo primero es escoger un premio, ya sea una golosina o un juguete que le guste mucho y llame su atención.
- Le mostrarás el premio en tu mano e irás moviéndolo por encima de la cabeza del gato sin que tenga posibilidad de atraparlo, al llevar su mirada hacia atrás se sentará y cuando esto pase tú dirás el comando “siéntate” y le darás su premio.
- Al principio tu gato no entenderá por qué lo estás recompensando, pero luego asociará la acción de sentarse con el premio.
- Luego puedes hacer lo mismo, pero con la mano que no tiene nada, hasta que tu mascota no necesite una recompensa para sentarse.
Saltar
- Igualmente, escoge un snack o algún objeto o accesorio que le guste a tu mascota para que te preste toda su atención.
- Le mostrarás lo que tienes en tu mano a una buena altura y tu felino tratará de alcanzarlo, así que cuando salte, dirás el comando “salta” y le darás el premio inmediatamente.
- Si quieres que salte de un lugar a otro, simplemente muéstrale a tu gato el premio sobre la superficie a la que quiere que salte, y cuando lo haga lo premias y dices el comando.
- Poco a poco ve quitando el premio y solo con la acción del movimiento de tu mano y el comando tu gato entenderá qué debe hacer.
Saludar
- De nuevo, elige el premio que le vas a dar, puede ser una galleta que le guste y que lo incentive a conseguirla.
- Muéstrale la galleta en tu mano y ciérrala, cuando ponga su pata sobre tu mano di el comando “saluda” y dale el premio.
- Si tu gato no pone su pata sobre tu mano, puedes tomar su pata y ponerla tú mismo sobre tu mano, dices el comando y lo premias hasta que lo haga por sí mismo.
- Poco a poco quita la recompensa para que no se acostumbre a solo hacerte caso si le das algo.
Chocar los 5
- Escoge el premio, y muéstraselo a tu gato.
- Pon tu mano más arriba de tu gato y cuando se estire y la toque con su mano dices “choca los 5” y le das el premio.
- Si intenta conseguir el premio de otra forma, cierra tu mano y di “no”.
- Hazlo varias veces a la semana, en sesiones cortas hasta que no necesites el premio.
Acostarse
Si tu gato ya sabe sentarse puede ser un poco más fácil que aprenda este otro truco.
- Igualmente, elige un premio y pídele a tu gato que se siente.
- Cuando lo haga, lleva el premio que tienes en la mano cerca a tu gato y luego hasta el piso guiándolo.
- Si se para o no intenta acostarse, no lo regañes o no hagas nada negativo, solo no lo premies y vuelve a intentarlo.
- A medida que tu gato se vaya estirando puedes darle el premio y decir “acuéstate” hasta que esté completamente acostado.
- Al igual que los anteriores, hazlo varias veces y ve quitando la recompensa poco a poco.
Dar la vuelta
- Una vez más, escoge algún snack que vuelva loco a tu felino.
- Cuando esté frente a ti, muéstrale el premio que tienes en tu mano, y luego ve llevando la mano alrededor de tu mascota de modo que empiece a dar la vuelta siguiendo el premio.
- Cuando de la vuelta completa, di el comando “vuelta” o “gira” y dale su recompensa.
Recomendaciones en el entrenamiento de gatos
Como había dicho anteriormente, ten mucha paciencia, si en la sesión de entrenamiento te estresas porque tu gato no está aprendiendo a la velocidad que quieres, termina la sesión y retómala luego.
La mejor forma de que tu gato aprenda es con refuerzos positivos y no regañándolo, así que toma aire y recuerda que ellos no nos pueden entender inmediatamente, debes tomarte tu tiempo para enseñarle con cariño y amor.
