¿Cómo presentarle un bebé a un gato? 7 consejos importantes

niña con un gatito

¿Pronto va a llegar un bebé a tu hogar, pero tienes miedo de la reacción que pueda tener tu gato con él? Bueno, llegaste al lugar correcto porque aquí te mostraré todas las medidas que debes tomar para que la presentación con tu bebé sea un éxito.

Importancia de la presentación de un bebé a un gato

Si tu gato nunca ha estado expuesto a bebés o niños pequeños, va a ser algo muy extraño para él. La sola presencia repentina de un bebé lo pondrá en alerta. De repente el gato sentirá la presión del ambiente con olores y ruidos nuevos para él, que lo pondrá en un alto nivel de estrés y ansiedad, actuando hostil o nervioso.

Dado esto, el comportamiento que puede adoptar como respuesta a ese cambio puede ser peligroso para quienes habitan el hogar. Por eso es importante el proceso de presentar a un gato con un bebé para que no haya tensiones en el ambiente o cambios extremos de comportamiento.

¿Qué debes enseñarle a tu gato antes?

Es importante que el gato se comporte de buena manera desde antes de conocer al bebé, se requiere de paciencia y constancia para que pueda aprender a actuar sereno y que acate ciertas normas.

  • Para que tu gato sepa cuándo está comportándose bien, es bueno que refuerces ese tipo de acciones con snacks, siempre cuidando su dieta balanceada.
  • Cuando le estés enseñando algo a tu gato o entrenándolo, procura que sea en un espacio donde no haya distracciones para que su aprendizaje sea más exitoso.
  • Debido a sus instintos, a los gatos les gusta escalar, cazar o rascar por lo que se subirán a ciertas partes donde no deben o querrán rascar algo que se puede dañar. Cuando esto suceda, simplemente dile “no” firmemente y luego llévalo a un lugar apto para que haga sus cosas. Así comprenderá que no debe hacer eso en ciertos lugares.
  • Los gatos se pueden sentir heridos muy fácilmente, su sentimiento de dignidad es grande. Por eso no se recomienda castigarlo o enfrentarse a él para evitar algún daño psicológico. Cuando haga algo mal, como dije antes, basta con un NO y luego lo llevas a otro lugar.
  • Cada que le presentes un nuevo ambiente o personas nuevas a tu gato, debes hacerlo poco a poco para que se acostumbre y se sienta cómodo con el tiempo. Si llegará una nueva persona, puedes darle alguna prenda para que la olfatee y se familiarice con su olor, mientras que con el lugar puedes dejarlo unos 5 minutos para que explore un poco, luego irás aumentando el tiempo. Esto se hace para evitar que el gato cree una rivalidad con una persona o se sienta alerta y actúe hostil en un ambiente desconocido.

¿Qué rutina deberá llevar tu gato ahora?

Tu gato puede seguir conservando su rutina de siempre, dado que son independientes, es más fácil dejarlos ir por su lado. Sin embargo, si eres la única persona que está a cargo del gato, vas a tener un bebé pronto y no hay nadie más que interactúe con él, debes acomodar el horario para darle la atención necesaria.

Ve cambiando la rutina de tu gato de manera gradual desde el momento que sepas que llegará un bebé a la casa. Lo ideal es que el proceso se haga con bastante anticipación para que el gato pueda adaptarse mejor. De igual modo, ve reduciendo el tiempo que emplees para jugar e interactuar con tu gato, así cuando llegue el bebé no sentirá que le quitaron la atención de repente.

Los gatos suelen estar activos en la mañana y en la noche por lo que una vez atiendas a tu bebé si se despierta temprano, puedes aprovechar esas horas para jugar con tu gato un rato. Por otro lado, en la noche resulta más fácil ya que el bebé queda dormido y podrás aprovechar ese momento para interactuar un poco más con tu mascota.

Para los aspectos de su comida y el cambio con su arenero, trata de mantenerlo como lo llevas para que el gato no sienta cambios bruscos de rutina. Y, de nuevo, como la actividad de los gatos es más independiente, siempre déjale juguetes para que se entretenga y déjalo dormir cuando él quiera.

Tu gato debe tener buena higiene y salud

Para evitar accidentes o algún problema de salud que el gato pudiera transmitir al bebé, es importante que el animal esté bien en todos los sentidos. Principalmente debe tener al día su esquema de vacunación y estar protegido contra parásitos externos (pulgas, garrapatas) e internos (gusanos).

Otro factor importante de los gatos son sus uñas, así que procura darle el cuidado que requieren para que estas no sean peligrosas para el bebé. También cuida su pelaje si es el caso de que suelta mucho, ya que hay personas que son alérgicas al pelo de gato.

Procura llevar al gato al veterinario para que te de la mejor solución posible. Igualmente cumple con el calendario de visitas para evitar alguna sorpresa con una enfermedad que se pueda estar desarrollando.

Riesgos para un bebé por la presencia de un gato

Cuando los niños están en sus primeras etapas de vida resultan ser más susceptibles a adquirir alguna enfermedad asociada con los animales. Por eso, la interacción es limitada o nula cuando aún son bebés.  Los riesgos que puede tener un bebé son:

  • Problemas en su respiración: dado que los gatos tienden a soltar pelo, es importante que este no ronde ni permanezca en el cuarto del bebé para evitar que deje estos pelos en el ambiente y que el bebé los inhale.
  • Infección transmisible a las personas: los gatos pueden transmitir enfermedades infecciosas ya sea rascándose, por medio de sus heces o dejando contaminado algún lugar que hayan tocado. El bebé puede infectarse si toca el objeto contaminado. Por eso es vital lavarse las manos después de la interacción con el gato. Algunas enfermedades que pueden afectarte a ti o al bebé son:
    Toxoplasmosis: infección causada por el parásito Toxoplasma gondii, que causa sarpullido, ictericia, entre otros, en el caso de los bebés. Para el caso de las embarazadas, pueden pasar la infección al feto y van a tener síntomas como fiebre, dolor de cabeza y garganta, etc.
    Fiebre por arañazo de gato: también es trasmisible por una mordida y provoca la inflamación de los ganglios linfáticos, fatiga, fiebre, etc, y la causa la bacteria Bartonella henselae.
    Toxocariasis: causada por un tipo de lombriz presente en gatos y perros. Esta infección provoca fiebre, alteraciones visuales, asma, y más.

La atención necesaria para tu gato

Ahora con la presencia de un nuevo integrante, no debes olvidar a tu gato. Como ya mencioné, debes hacer los cambios gradualmente para que el gato pueda acostumbrase. No cambies tu actitud con tu gato para que no se sienta excluido al momento en que el bebé llegue.

Es importante que si te es imposible darle la atención necesaria a tu gato porque el cuidado del bebé te toma más tiempo, es mejor que le pidas a alguien de tu confianza que el gato también conozca y se lleven bien para que te ayude a cuidarlo.

Si la situación se pone muy complicada, ya sea porque no tienes quien cuide al gato o su reacción hacia el bebé sea de hostilidad, será mejor que pienses en darlo en adopción a una familia con la cual tengas plena seguridad de que lo cuidarán bien.

Debes ser muy responsable para que pueda haber una buena relación con tu gato y que a su vez esta no interfiera con el tiempo de crianza del bebé. Es muy bueno que los niños crezcan con animales para que sepan el valor y el cuidado que deben tener con ellos siempre.

¿Cómo presentarle un bebé a un gato?

Para que sea un éxito la primera interacción con el bebé seguirás dos fases, una con medidas anticipadas y la segunda cuando el bebé llegue a casa.

Medidas anticipadas

  1. Deja que tu gato interactúe con el nuevo ambiente cuando empieces a organizar la habitación del bebé. El gato debe explorar los nuevos muebles y todas las cosas que se ubiquen en el cuarto para que no se sienta excluido. Procura que siempre haga esas inspecciones cuando tú estás presente.
  2. Cuando ya se haya adaptado al nuevo ambiente, limpia la habitación muy bien y déjala aislada para que el gato ya no quiera ir allí y deje su interés por ese lugar. Esto hará que se olvide del lugar para que cuando el bebé ya esté allí, no lo moleste.  Puedes tomar medidas como poner una malla para que vea la habitación, pero no entre o rociar olores que le disgusten para que se aleje de a poco.
  3. Pon sonidos de bebé como balbuceos, llantos y todo tipo de sonidos que haga un bebé, para que el gato reconozca los nuevos ruidos que van a llegar y no los tome con sorpresa. Para que este proceso se facilite, juega un poco con el gato y luego pon a reproducir los sonidos, así los asociará con un rato agradable.
  4. Deja que tu gato olfatee algunas prendas del bebé como medias, para que se familiarice con el olor que ahora va a frecuentar la casa. También puedes usar talco o loción que usará tu bebé para que haya más olores que reconozca de su amo.

Medidas el día de la llegada

  1. Cuando llegues con tu bebé, procura que el lugar esté tranquilo, sin distracciones o ruidos muy fuertes. Saluda a tu gato de forma calmada y quédate unos minutos mientras se conecta con el ambiente.
  2. Después deja una prenda del bebé para que el gato comience a olfatearla y se familiarice con el olor del bebé en el momento.
  3. Después llama a tu gato con cuidado de acercarse mucho y con una mano acaricia al gato con los calcetines que el bebé haya usado recientemente. Esto para que el gato identifique al bebé como un integrante nuevo en la familia.
  4. Ahora deja que el gato olfatee los pies del bebé acercándolo muy lento y suave a su posición. Mientras haces estos contactos, recuerda elogiar a tu gato para que sepa que está actuando bien y refuerza con un snack si puedes.
  5. De ahí en adelante si tu gato está presente en una interacción con tu bebé, elógialo también para que asocie cosas positivas cuando el bebé está presente.
  6. Finalmente, nunca debes dejar a tu bebé con un gato solos sin supervisión. Los gatos no deben por ningún motivo dormir con un bebé, pasearse por su alcoba y mucho menos interactuar con los objetos del bebé sin después desinfectarlos por completo.

*El único momento en que el gato tiene contacto con las prendas del bebé es para el reconocimiento de alguien nuevo. Después de esto, se debe hacer la respectiva desinfección de las pertenencias del bebé.

Ahora que ya sabes cómo presentarle un bebé a un gato, ya puedes estar tranquilo de que podrán tener un buen recibimiento y una excelente convivencia de ahí en adelante.

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