Mantas Refrigerantes para perros: Qué son y cuál escoger

Tal vez hayas oído hablar de estas mantas refrigerantes para perros que son increíbles en temporadas calurosas, pero tengas dudas sobre cómo funcionan. Y si es la primera vez que escuchas de esto, déjame decirte todo lo que necesitas saber antes de conseguir una para tu mascota.

¿Qué son y para qué sirven las mantas refrigerantes para perros?

Así como su nombre lo indica, son una especie de manta, alfombra o colchoneta que generalmente contienen un gel refrigerante en su interior. Estas mantas absorben el calor corporal de tu mascota y liberan frío, refrescando y bajando su temperatura.

Cuando ya absorbió todo el calor y se haya bajado la temperatura de tu mascota, la manta dejará de enfriar, sin embargo, cuando tu perro se quite del lugar, la manta volverá a recomponerse y estará enfriando de nuevo luego de unos minutos.

Es recomendable dejar este tapete en la sombra, ya que si lo dejas en un lugar donde dé el sol, absorberá el calor y no enfriará.

Así que estas mantas son ideales en épocas de mucho calor, cuando vemos que los peludos están buscando lugares para enfriarse y se tiran en el piso esperando aliviarse y refrescarse. También, las mantas refrigerantes podrían ayudarnos a evitar golpes de calor que pueden ser mortales para las mascotas.  

Tipos de mantas refrigerantes para perros

Existen diferentes tipos de mantas refrigerantes y no todas utilizan gel, así que su funcionamiento y el mantenimiento que le debas dar variará.

Manta refrigerante con agua

Estas mantas no contienen el gel refrigerante, lo que debes hacer para que funcionen es rellenarlas con agua, solo tienes que introducirlas en un balde lleno de agua o en la bañera hasta que la colchoneta se infle por el agua.

Luego tu can podrá acostarse encima y refrescarse con el frio natural que proporciona el agua.

Manta con capas de telas

Esta manta no tiene ni gel ni funciona con agua, da un efecto refrescante gracias a las 3 capas de diferentes tipos de tela con las que está hecha (seda de hielo, algodón y malla transpirable.

Sin embargo, esta no refresca tan bien como los otros tipos de mantas.

Manta de gel

Esta es el mejor tipo de manta ya que no requiere que la estés rellenando de agua y es muy refrescante para los perros. Como te dije, el gel por sí solo absorbe el calor corporal del perro.

Luego de enfriar al animal, hay que dejarla unos minutos (sin que tu mascota esté encima) para que las partículas de gel puedan recuperarse y puedan volver a enfriar.

Nota: Al comprar una de estas mantas debes tener en mente las medidas de tu perro ya que vienen de diferentes tamaños, elije una que sea del tamaño exacto de tu perro o un poco más grande, pero nunca más pequeña, claramente.

¿Deberías conseguir una manta refrigerante para tu perro?

¿Es una buena idea adquirir este producto? Definitivamente.

Los perros no se deshacen del calor tan fácilmente como nosotros, ellos traspiran por sus patas y en algunas ocasiones esto no es suficiente para que logren bajar su temperatura en un tiempo óptimo, por esto, este implemento es ideal.

Ya sea porque vives en un lugar caluroso o para época de verano, la manta refrigerante es un accesorio que ayudará mucho a tu peludo. Además, también puede servirte si te gusta viajar con tu perro, ya que será una manera muy cómoda para viajar y evitar que tu perro sufra por el calor.

¿Cuál manta refrigerante sería la ideal para mi perro?

Los diferentes tipos de mantas están entre 25 a 50 USD en internet. Normalmente, la más cara es la que contiene gel ya que es la que mejor enfría y menos cuidados necesita para realizar su función.

Para saber cuál comprar, lo que debes tener en cuenta es qué tan caliente es el lugar donde vives o a donde piensas viajar, y dependiendo de esto puedes elegir cuál es la que tu perro necesita.

Si es un lugar muy caliente, es recomendable la que tiene relleno de gel, ya que es la que más enfriará a tu mascota. En cambio, si es un lugar no muy caliente, o solo la quieres para que en algunos días soleados tu mascota esta cómoda, puedes optar por la de tela o las que debes rellenar con agua. En este caso también te ahorrarás unos pesos.

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